Gracias al dolor podemos detectar situaciones que no nos convienen y nos permiten accionar mecanismos para poner remedio ante ese daño real o potencial.
Hablaremos sobre los diferentes umbrales de dolor, de la relación entre la cantidad de daño y la cantidad de dolor, el peligro que acecha, la amenaza de daño inminente o el juicio a veces erróneo del cerebro ante la lesión o posible lesión.
Entendiendo el dolor: Ladrones, cornadas y alarmas