Si miramos el vaso medio vacío cuando aparece la lesión pensaremos: “Para qué habre hecho esto" , “ No debería esforzarme tanto” o “ Cómo puede ser que me haya lesionado si no he hecho nada fuera de lo normal".
Si vemos el vaso medio lleno, podremos pensar: “ Esta lesión podría haber sido peor” o “Recuperarme de esto me va a servir para aprender cosas para poder evitarlo más adelante".
Intenta dirigir tus pensamientos hacia el último, te recuperarás antes y hasta puede que te lleves alguna lección para no volver a caer en lo mismo.
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Hace un par de meses me lesioné el dedo gordo del pie. No me había lesionado nunca esa zona. Soy consciente de la importancia del 1er dedo en la biomecanica de la marcha y suelo realizar ejercicios específicos para los pies porque me ayudan a prevenir dolores del pasado. Aún así, voy y me lesiono el dedo. Vaya por Dios.
Muestro imagen:
Uno de los colores preferidos de mi hija es el violeta/morado. Así que ella no retiraba la vista de mi dedo con cara de dolor.
Afortunadamente no hubo ni rotura ni luxación. Y esto fue por una razón: La Movilidad. En el resto del cuerpo, mi movilidad no es para echar cohetes, pero mis dedos de los pies no van mal.
Gracias a que mis tendones, ligamentos fascias y otros tejidos blandos de esa zona suelen tener un estímulo repetitivo de fuerza en rangos máximos, es decir, de ganancia de movilidad, aquel gesto lesivo tan sólo provocó daños menores cuando podía haber roto estructuras o luxado articulaciones si éstas hubiesen sido rígidas.
Y el argumento de “ si no estuvieses descalzo, no te hubieses hecho eso" no me vale. Porque precisamente, caminar y ejercitarme descalzo es lo que me está permitiendo mejorar esta lesión otras dolencias del pasado. La sensibilidad y movilidad de los pies es una de las mejores habilidades que podemos mejorar. ¿Te gusta que la casa donde vives tenga unos buenos cimientos para que no se venga abajo? Supongo que sí. Pues aplícalo a tu cuerpo.
El grado de distensión, esguince, sobreestiramiento o pequeñas roturas de tejidos blandos que podemos tener en una lesión “leve" como ésta es importante únicamente para valorar cuanto tiempo de reposo relativo le voy a dar a la articulación antes de comenzar con la recuperación más activa.
Al principio, en mi caso, mucho hielo y masaje drenante. Poco a poco, empecé con movilidad pasiva respetando el dolor y ahora ya trabajo la fuerza en rangos amplios. Todavía con algo de dolor pero cada vez menos. Mi Angulo Medio se ha visto disminuido pero ya empiezo a recuperarlo. Haz click aquí para escuchar el episodio del podcast que trata sobre esto del Angulo Medio.
En definitiva, el movimiento va a ser clave en cualquier recuperación. La complicación viene en la intensidad, frecuencia, repeticiones, descansos y ayuda externa que le demos. Para lo cual, es importante acudir a un profesional que te guíe.
Pero un primer paso en la prevención o recuperación de lesiones del pie son estos ejercicios:
Espero que te sirvan!
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